El jamón (ibérico, serrano) no es sólo un ingrediente más de nuestros bocadillos o un aperitivo más en nuestras cenas o comidas especiales. Es mucho más que eso.  Ya son muchas las ocasiones en las que vemos al jamón en cualquier producto, por ejemplo, lo vemos en un pizza, una croqueta, una tostada…las posibilidades son muchas. Pero ahora el jamón, tiene además un valor añadido. No sólo por su sabor, sino que su presencia ya denota un cierto aire de glamur. Es un auténtico producto gourmet al que todos pueden acceder sin necesidad de ningún esfuerzo económico.
Desde hace algunos años es muy común ver como en cualquier evento, sobre todo en las bodas, está presente un profesional que se dedica a cortar jamón (normalmente jamón ibérico) en ‘directo” para todos los asistentes. Este profesional forma parte del espectáculo y su presencia está por tanto estudiada. En la celebración, estos profesionales también tienen su papel de captar y atraer la atención de los comensales para que saboreen ese jamón ibérico que seguro no va a dejar indiferente a nadie. El cortar jamón, es considerado como un arte, como una profesión y las personas que lo hacen de manera profesional tienen como un don especial ya que saben y entienden de jamón y sobre todo saben cómo sacarle el máximo beneficio al corte.  Son los maestros cortadores de jamón. Un ejemplo de ello son los hermanos Lázaro Fernández, son maestros del jamón y crean escuela (Servicio de corte de jamón para todo tipo de eventos). Su técnica tiene una maestría especial que hace que cuenten con el respaldo de una larga trayectoria profesional en la que su trabajo se ve recompensado en premios y reconocimientos.
En algunos eventos, como por ejemplo en una boda, puedes ver cómo poco a poco todos los comensales se acercan rápidamente hacia donde están los cortadores de jamón o incluso, ves cómo persiguen a los camareros o camareras que reparten en sus bandejas. Algo tendrá el jamón que vuelve loco a los comensales.  Desde que su popularidad se hizo cada vez más notable, el auge de la profesión de cortador de jamón también ha ido en aumento. Ser cortador de jamón no es sólo coger el cuchillo y ofrecer un trozo al comensal. Es mucho más que eso.
Puede que no todos los cortadores de jamón (sobre todo jamón ibérico) compartan las mismas pautas a la hora de realizar el corte, cada uno aplica su propia técnica y tiene su estilo personal, pero todos sí comparten el importante valor que le otorgan a este producto.